Quizá vienes del running de asfalto, o de la montaña, del mundo del trekking, o de cualquier otro deporte, y, desde hace algún tiempo, te llama el mundo de las carreras del montaña y quieres iniciarte en la práctica del Trail Running.
No lo dudes, cálzate unas zapatillas y date una vuelta al trote por monte. Si puede ser, acompañado de tus amigos. Que sea una ruta cortita, poca distancia y poco desnivel. Estoy seguro de que te va a encantar y, descuida, tienes muchísimas posibilidades de engancharte a este deporte, porque sí, el trail running engancha. Así que, tras este recorrido de prueba, seguro que vas a querer profundizar un poquito más y te estarás haciendo un montón de preguntas.
Base de entrenamiento
Un deporte de resistencia como es el trail running exige cierto nivel de forma física. Y no se trata de correr para obtener la forma sino al revés, por lo menos al principio.
Si vienes de otros deportes y ya tienes una base, perfecto. Si no es así, trata de ganar fortaleza en tu musculatura (gimnasio, fortalecimiento del core, propiocepción, etc.). Comienza a correr en llano (alternando correr/caminar si fuera necesario), para ir aumentando distancias y desnivel muy poco a poco. Un programa de alguna aplicación online te facilitará mucho las cosas. Por supuesto, si contratas los servicios de un entrenador aún mejor.
Y no tengas prisa, respetar los períodos de adaptación necesarios es muy importante.
Material
Te asaltarán muchas dudas con el material (ropa, accesorios) y con la alimentación (antes y durante los entrenamientos). Hay muchísimas webs, entre ellas OFERTAS TRAIL RUNNING, con un montón de información al respecto. No te vuelvas loco, adquiere material barato para tus primeras salidas; con el tiempo y cuando vayas ganando en experiencia ya adquirirás mejor material, más técnico (y por tanto más caro, por supuesto).
Según la estación del año en la que te encuentres, así será el material mínimo que vas a necesitar.
En verano necesitarás protección para la cabeza (gorra), gafas de sol, ropa transpirable y bebida para hidratarte.
En invierno, una chaqueta cortavientos es imprescindible y protección para el frío (gorro, guantes).
En cualquier caso, unas zapatillas son imprescindibles. Y, por favor, que no sean de asfalto, necesitas unas zapatillas específicas para el trail running (por agarre, protección, etc.).
Seguridad
No sólo en tus primeras salidas, siempre, trata de salir a correr por la montaña acompañado. También es importante consultar la predicción metereológica y llevar el teléfono móvil (más adelante quizá un reloj GPS). En la montaña las condiciones metereológicas pueden cambiar en cuestión de muy poco tiempo.
Una ligera planificación no está demás (ruta, horarios, etc.).
No hay que olvidar hidratarse (beber a pequeños sorbos antes de tener sed es lo aconsejable) y comer lo suficiente (antes y después del esfuerzo), ya que se consume bastante energía.
Carreras
Con el tiempo vas a notar cómo mejoras tu nivel de resistencia y tu técnica (a la hora de las subidas y también de las bajadas). Quizá entonces te entre el gusanillo de participar en alguna carrera corta de 8 o 10 km. Es en ese momento cuando ya estás perdido, amigo, el Trail Running te está empezando a “enganchar” y ya no lo vas a poder abandonar. Pasarás a distancias y desniveles mayores, quizá algún día llegarás a participar en ultras. Estoy seguro de ya no vas a abandonar nunca la práctica de este deporte.
Y recuerda, tanto si eres un corredor de montaña novel como si ya te has convertido en un “pro”, lo más importante siempre va a ser disfrutar, no lo olvides nunca.
Jose Sucman YouTube